Leopoldo López Gil: la necesidad de reforzar la presencia europea en América Central y el Caribe

Miembro de la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana, el Eurodiputado español es un defensor de los derechos humanos, la democracia y la seguridad pública en el corazón de las Américas. Una lucha de larga data en la que le gustaría ver «la proximidad cultural e histórica entre la Unión Europea y los países de América Latina y el Caribe convertida en auténticas políticas» para garantizar la autonomía y la estabilidad de ambos continentes. Extracto de la entrevista con Leopoldo López Gil.
Leopoldo-Lopez-Gil

Una explosión de vulnerabilidades

«Las naciones de América Central, entre ellas, Costa Rica, Guatemala y República Dominicana han expresado una enorme preocupación por la interacción entre el tráfico de drogas y la migración irregular, que es el principal motor de la explosión de violencia», explica Leopoldo López Gil. Estos migrantes son explotados como fuerza de trabajo para la economía sumergida, y trabajan como mulas o en redes de prostitución para poder sobrevivir. «Más de 200 000 migrantes haitianos viven actualmente en República Dominicana, tras salir de su país sin documentos oficiales. Un total de 7,2 millones de venezolanos también han huido de la pobreza y se han dispersado por toda Sudamérica. Algunos se han dirigido a Estados Unidos a través de América Central, mientras que aproximadamente un millón han intentado migrar a Europa. [Porous borders and] [Las fronteras permeables y] la falta de documentación representan grandes amenazas para la seguridad de los países atravesados por los corredores migratorios», continúa el Eurodiputado.

La migración en América Central ha crecido un 40 % durante la última década, pasando de 2,8 a 3,9 millones en el corazón del Triángulo Norte formado por Honduras, El Salvador y Guatemala. Desde 2014, el fenómeno meteorológico de El Niño ha minado tanto la seguridad alimenticia como los ingresos de los hogares, causando la salida de al menos un miembro del 96 % de los hogares. . Y los países de la región están entre los más sensibles al calentamiento global. «Por desgracia, existen pocas medidas concretas en términos de seguridad regional [mientras] [while]que la delincuencia transnacional sigue llegando al núcleo de los sistemas políticos, financieros y judiciales del continente», lamenta el representante español. Los escándalos de corrupción y la falta de respuestas coordinadas han dado lugar al endurecimiento de las políticas migratorias y a la militarización de la seguridad pública como respuesta a la inseguridad.

Jus ad bellum

En El Salvador, en un solo día de marzo de 2022, fueron asesinadas 87 personas afiliadas a las «maras», pandillas como MS13 y Barrio 18. Desde entonces, el Presidente Nayib Bukele ha estado librando una «guerra sin cuartel» contra estos grupos delictivos y ha proclamado el «estado de excepción» para facilitar la localización de los miembros de las pandillas. Entre marzo de 2022 y de 2023, más de 70 000 personas fueron encarceladas, a la espera de un juicio, mientras que 153 detenidos murieron a consecuencia de torturas o lesiones no tratadas. En mayo, la Asamblea votó a favor de la compra de 8 vehículos blindados tácticos Hurricane valorados en 3,6 millones de dólares como parte del Plan Control Territorial, diseñado para poner freno al control territorial de las «maras ».[1].

Institucionalizar el diálogo con Europa

Aunque Europa ha realizado compromisos modestos a través de programas como Copolad, EL PAcCTO y Eurofront, las conclusiones de la Cumbre UE-CELAC de julio perfilan el deseo de profundizar en el diálogo birregional. «La UE no presta suficiente atención a las cuestiones de seguridad y defensa con América Latina y el Caribe y, por tanto, no cuenta con una estrategia específica en este ámbito. No obstante, la declaración final de la Cumbre UE-CELAC es un documento inusual para este tipo de reuniones. En unas diez páginas, el texto se asemeja a un programa de trabajo que institucionaliza un diálogo birregional permanente. Se trata de un auténtico paso adelante que podría conducir a la creación de una organización capaz de centralizar la documentación y supervisar de forma eficaz la aplicación de las decisiones tomadas», sostiene el Eurodiputado. Para empezar, Global Gateway planea invertir más de 45 000 millones de euros para financiar 135 nuevos proyectos en la región. Al mismo tiempo, Bruselas ha firmado un doble memorando de entendimiento[2]. Actualmente, se está negociando una alianza forestal con Honduras como parte de la Agenda Verde Europea. El otro acuerdo pretende acelerar la «transformación digital, la transición verde, la prevención de la violencia, el empoderamiento de la mujer y el apoyo a los jóvenes» en El Salvador, según Josep Borrell, Jefe de la Diplomacia Europea[3]. La UE también está incrementando su ayuda humanitaria a Haití con un paquete de emergencias valorado en 10 millones de euros, donando un total de 18,5 millones de euros para los 5,2 millones de personas necesitadas de ayuda humanitaria en el país, que está siendo azotado por la inseguridad. Para crear una cooperación duradera, «la UE debe basarse en sus vínculos culturales e históricos con América Latina y el Caribe, con los que tenemos una proximidad que no existe en ningún otro continente. Este legado debe transformarse en políticas genuinas para afrontar los desafíos de nuestro tiempo. Este continente ha experimentado unos de los peores desarrollos económicos en los últimos 50 años. Europa debería presentar programas adecuados de educación y formación profesional para aumentar la productividad de los trabajadores sudamericanos. Es una necesidad existencial que va más allá de la seguridad regional», concluye Leopoldo López Gil.

Comentarios recogidos por S&D MAGAZINE

Facebook
Twitter
LinkedIn
Email
Print